El acto, previsto para el viernes 19 de diciembre, marca un quiebre con la histórica tradición marplatense y abre un nuevo capítulo en el reacomodamiento interno del peronismo bonaerense.
La elección de Mar Chiquita como sede no es casual: Kicillof busca reforzar la figura de Paredi como el principal articulador de la Quinta Sección, consolidándolo como referente territorial de confianza en un momento en que el oficialismo ya comienza a mirar hacia las elecciones de 2027. El espaldarazo del Gobernador pone en valor la lealtad del senador, quien desde hace años sostiene un vínculo directo y estable con la Gobernación situada La Plata.
La decisión de apartarse de Mar del Plata para el lanzamiento, luego de diecisiete ediciones consecutivas en la Plazoleta Almirante Brown y el paso por Miramar en 2024, también provoca movimientos en la interna local. La ausencia de la ciudad balnearia como escenario central deja en un lugar incómodo a figuras como Fernanda Raverta, referente de La Cámpora, y al exintendente Gustavo Pulti, líder de Acción Marplatense, ambos protagonistas de la disputa por el liderazgo en la región.